Evidencia científica de la fitoterapia como alternativa a los antimicrobianos de síntesis según la EMA y la EFSA (RONAFA)

Texto por: María Barrera Báez. Revisado por: Álvaro Fernández-Blanco B.

Extraído de: https://www.efsa.europa.eu/en/efsajournal/pub/4666

La resistencia a antimicrobianos es una de las principales causas de mortalidad en todo el mundo. Solo en España mueren ya 4.000 personas cada año a causa de infecciones hospitalarias producidas por bacterias resistentes a antibióticos de forma directa; de manera indirecta la cifra se estima que puede ser varias veces superior.

Además, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico ha estimado que el coste que esto supone para los sistemas sanitarios de los países de la Unión Europea (UE) es de alrededor de 1.100 millones de euros anuales y provoca 3 billones de euros de pérdidas del Producto Interior Bruto (PIB).

Los antibióticos de laboratorio se han empleado durante las últimas décadas en la cría de animales, principalmente para el tratamiento de diversas afecciones pero también con fines zootécnicos, es decir, para mejorar la producción animal. En la UE, su uso como aditivo para piensos destinados a potenciar el crecimiento está prohibido desde el 1 de enero de 2006, prohibición a la que se han sumado recientemente otros compuestos antimicrobianos como los anti-protozoarios. Este es un tema que ha sido objeto de considerablesestudios, sobre todo en los últimos años, debido a quetiene graves repercusiones en la salud humana.

Ante esta problemática y debido al interés que surge por desplegar posibles alternativas al uso de tales compuestos sintéticos en la producción ganadera, la Comisión Europea pidió en 2017 a la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) y a la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) que emitieran un dictamen científico conjunto sobre medidas que reduzcan la necesidad del empleo de antibióticos de laboratorio en la cría de animales en la Unión Europea y las repercusiones resultantes sobre la seguridad alimentaria, teniendo en cuenta el impacto sobre la salud pública y la salud y el bienestar de los animales.

Tras un exhaustivo estudio, que pasa por el análisis de cómo se origina la resistencia o qué factores en el empleo de antibióticos son los que favorecen la aparición de estas en el sistema productivo animal, los expertos científicos encargados de realizar el trabajo,sacan a la luz una serie de herramientas alternativas (Tabla 1) que han demostrado ser eficaces en el remplazo de estos compuestos sintéticos.

A lo largo de su estudio, realizan una revisión de gran número de publicaciones que confirman que el uso de productos botánicos (fitoterapia) afecta favorablemente a la salud de las especies de animales de granja, mediante diversos modelos de acción potenciales, por ejemplo, mejorando la integridad de las vellosidades del sistema digestivo.Como resultado de su trabajo destacan que no solo es beneficioso para la salud de los animales, sino que también lo es para el medio ambiente, ya que algunos extractos vegetales son capaces de reducir la producción de gases de efecto invernadero por parte de estos, tal y como afirma Hossain et al. (2015).

Este grupo de científicos indica como referencia que Bilkei et al. (2011) demostraban que la suplementación con orégano (Origanum vulgare) mejoraba los parámetros productivosy reducía la mortalidad en cerdos de engorde, o como el rábano picante (Armoracia rusticana) reduce significativamente la aparición de enfermedades post-parto y la mortalidad pre y post-destete de lechones, con resultados comparables a los de la doxiciclina. Asimismo Bampidis et al. (2006), demostraron que las hojas de orégano como solución oral es igual de eficaz que la neomicina frente a la diarrea aguda en terneros afectados.

Por otro lado, se menciona cómo los taninos de distintas fuentes también han demostrado tener actividad antimicrobiana (Schalbert, 1991), siendo beneficiosas para las aves de corral, siempre teniendo en cuenta parámetros como la concentración de producto, estructura del compuesto, composición de los piensos, etc.

Los informes efectuados por Elizondo et al. (2010) muestran que los taninos derivados de castaño (Castanea sativa) y quebracho (Lysilo madivaricatum) tienen actividad antibacteriana y antitoxínicas frente a Clostridium perfringens y sus toxinas. En cuadros de enteritis necrótica en pollos de engorde, el castaño (Tosi et al., 2013) o el quebracho (Redondo et al., 2014) reducen la incidencia y la gravedad de las lesiones macroscópicas y mejoran el rendimiento productivo de los animales. La berberina  (Berberis spp.) posee actividad antimicrobiana contra multitud de organismos, como bacterias, virus, hongos, protozoos y helmintos. Tummaruk et al. (2009) demostraba que los lechones que ingerían berberina o colistina tenían mejores ganancias medias diarias que los tratados con halquinol.

Dentro de los productos botánicos se encuentran los aceites esenciales (AE),obtenidos principalmente de plantas aromáticas, hierbas o especias (Yang et al., 2009). Los aceites esenciales contienen multitud de componentes activos que pueden tener mecanismos de acción diferentes y actuar de forma sinérgica (Senatore, 1996). Además, es difícil predecir la eficacia de los AE, ya que los componentes activos pueden variar en función de múltiples factores(Wenk, 2006).También el método de aplicación afecta a la eficacia, viéndose reducida cuando se administra en piensos (Si et al. 2006) por alta volatilidad y escasa solubilidad de los componentes activos. De ahí la importancia de las nuevas tecnologías galénicas como la microencapsulación en lípidos o glúcidos de solubilidad controlada.

Su efecto positivo y las limitaciones de estos se ha discutido en algunos artículos para cerdos (de Lange et al., 2010), aves de corral (Diarra&Malouin, 2014) y acuicultura (Chakraborty&Hancz, 2011; Reverte et al., 2014; Bulfon et al., 2015; Randrianarivelo et al., 2010).Todas las revisiones concluyen que las propiedades beneficiosas y la eficacia dependen de la parte de la planta que se emplee, el método de preparación y la concentración de uso. Además, sacan a la luz la necesidad de estandarizar los protocolos para la preparación/extracción, dosis-seguridad y la determinación de la dosis y la eficacia.

En resumen, la revisión realizada dentro del marco de RONAFA saca a la luz la gran cantidad de estudios que se han realizado y que demuestran la eficacia de la fitoterapia como alternativa totalmente válida al uso de antimicrobianos de síntesis. Sin embargo, para lograr reducir el empleo de antibióticos monomolécula fabricados en laboratorio, este grupo de herramientas de origen natural deben ir acompañadas de otras medidas que salen a la luz en este dictamen científico, como son: el desarrollo de estrategias nacionales; sistemas amortiguados para el seguimientodel uso de antimicrobianos y el desarrollo de la resistencia a antimicrobianos; uso de planes sanitarios en explotaciones; aumento de la responsabilidad de los veterinarios en la prescripción de antimicrobianos; aumento de la disponibilidad de diagnósticos rápidos y fiables; mejora de los procedimientos de cría y gestión para prevención y control de enfermedades; replanteamiento de los sistemas de producción ganadera para reducir el riesgo inherente a las enfermedades.

Y algo muy importante que a veces se olvida y que también promovemos desde Boalvet con estas publicaciones… formación, educación y sensibilización del público no especializado.